Lo más importante es hacer caso a ese proverbio que dice “no dar un pie en falso”. Cualquier actuación errónea que a priori nos puede parecer prudente, puede dar al traste con todo el proceso posterior de reclamación.
Al hilo del citado proverbio y como primer consejo, contacten con un abogado lo antes posible si creen ser víctimas de una negligencia médica. En derecho igual que en medicina, el tiempo es crucial. Cuanto más tarde se intente dar solución al problema peores serán los resultados obtenidos.
También es muy importante pedir una copia de todo documento que se firma. Ya no solo en el momento crítico o evidente de una negligencia, sino que para cualquier tipo de operación/intervención médica. Que no les de vergüenza pedir a la enfermera, celador o médico de turno una copia de lo que están firmando. Ustedes están en su derecho de pedirlo y el profesional sanitario de entregárselo. Cuanta más certeza se tenga sobre los documentos existentes y firmados, mejor será luego la defensa por parte de su jurisperito.
Tampoco debemos pasar por alto un error común de muchas personas: internet. Gran parte de la población cuando se sienten preocupados, acuden a las redes sociales o buscadores online creyendo que van a obtener soluciones milagrosas. No se engañen, si fuese tan fácil, no existirían abogados. Uno de los errores más frecuentes en las páginas de sugerencias es invitarles a pedir la historia clínica. Error. Deje que sea su abogado quien le aconseje que pedir y cuándo pedirlo. Si lo hacen a su aire, pueden tener suerte o pueden dar al traste con la reclamación pues solo se puede pedir una vez al año, y si hace falta con posterioridad pedir más pruebas no podrán solicitarlo.
Por último quiero recordarles que de manera general (salvo excepciones) el plazo de reclamación es de un año desde que ocurrió la presunta negligencia. Por lo que sin prisa, pero sin pausa, no dejen para mañana la llamada. A veces las prisas no son buenas, y más cuando se trata de asuntos delicados que a los juristas les lleva muchas horas de estudio. Para usted un día arriba o abajo no le puede suponer nada, pero para un abogado que vive entre plazos y prescripciones, es crucial.
Debes contratar los mejores abogados en negligencias médicas
Los casos de negligencia médica pueden durar largo tiempo en los tribunales y propiciar un duro impacto en la vida del demandante.
Es por esa razón que es de suma importancia, contratar los mejores abogados en negligencias médicas, para que puedas estar tranquilo y confiado de que tendrás una apropiada asesoría y la seguridad de estar representado favorablemente.
Nuestros juristas expertos en negligencia médica, son capaces de utilizar otros casos que han litigado y en los que han llegado a acuerdos de forma exitosa. Podemos darte las mejores referencias si es necesario.
Contratar un abogado especialista en negligencias médicas de nuestro despacho, aumentará las probabilidades de lograr los mejores resultados y la solución deseada.
Nos encargamos de los siguientes casos de negligencias médicas
Hay una serie de negligencias en todas las ramas médicas, desde las ginecológicas y odontológicas, hasta las oftalmológicas, pasando por cirugías, traumatología, neonatología, dermatología y muchas otras.
Una eficiente praxis médica puede suceder con mucha frecuencia cualquier tipo de centro de salud (público o privado).
En la mayoría de los casos, las víctimas no denuncian la situación, por no conocer con exactitud el procedimiento a seguir, a qué instancia acudir, o si su caso es considerado una negligencia médica.
En otros casos, si se realiza la denuncia con las evidencias correctas, pero no hay ninguna indemnización, debido que se llega a un acuerdo entre el centro hospitalario, el médico y el gremio de médicos, para retrasar el juicio sobre la indemnización o rechazar el caso.
En esos casos, nuestros abogados especialistas en negligencias médicas, te ofrecerán la mejor asesoría y las herramientas necesarias, para lograr el pago de la indemnización que te mereces.
Entre los casos de negligencia médicas más comunes, que atendemos en nuestro despacho de abogados, están:
- Examen del paciente con diagnóstico equivocado.
- Todo tipo de intervenciones quirúrgicas con resultados negativos no deseados.
- Lesiones graves o fallecimientos provocados en intervenciones quirúrgicas sencillas.
- Resultados no buscados de parálisis, paraplejias o tetraplejias o disfunciones nerviosas.
- Errores en interpretaciones de resultados en pruebas diagnósticas.
- Errores en transfusiones.
- Realización de cirugías en lugares equivocados.
- Errores grotescos en diagnósticos o tratamientos.
- Daños originados por mal estado o uso indebido de objetos, aparatos y medicamentos.
- Suicidios prevenibles.
- Infecciones intrahospitalarias por bacterias y virus.
- Errores de identidad del paciente.
- Omisión de pautas básicas para el diagnóstico de una enfermedad.
- Falta de control de los auxiliares médicos.
- Daños ocasionados por médicos y personal asistentes.
- Seguimiento deficiente de embarazos y partos.
- Daños en el feto por negligencia médica en el transcurso del parto.
- Falta de detección de malformaciones visibles.
- Lesiones producidas debido al mal funcionamiento hospitalario (caídas, mala práctica en funciones de enfermería, golpes con objetos o aparatos, entre otros)
- La falta de puesta en práctica de las analíticas indicadas en protocolos y guías médicas.
